El poder de los abrazos

Un abrazo puede durar 10 segundos, sus beneficios, para siempre.

Queridos lectores ¡Feliz Año Nuevo 2022! hoy les traemos un tema que seguramente muchos de ustedes pusieron muy en práctica durante las pasadas fiestas decembrinas. Nos referimos a los beneficios de los abrazos. Es cierto. Abrazar a alguien por tan solo 10 segundos aumenta las hormonas que te hacen sentir bien, como la oxitocina. Enseguida enlistamos para ti cinco beneficios de abrazar:

1. Nos aportan seguridad desde la infancia. El contacto corporal es esencial en el desarrollo de un individuo desde las primeras etapas. Las investigaciones muestran que los bebés que reciben mucho afecto físico desarrollarán mejores mecanismos de supervivencia a medida que crecen. 2. Reducen los niveles de estrés Puesto que los abrazos aumentan los niveles de oxitocina, un buen abrazo puede ayudarte a sentirte más tranquilo y menos ansioso. Recientes estudios revelan la capacidad de los abrazos para atenuar los estados de ánimo negativos. ¿Estás estresado por algo? ¡Elimínalo con un abrazo! 3. Contribuyen a nuestra felicidad La oxitocina no es la única hormona que se libera durante un abrazo. Los abrazos también causan la liberación de serotonina y dopamina, las cuales ayudan al estado de ánimo. 4. Ayudan a bajar la presión arterial. Parece increíble que una simple señal de estima pueda contribuir a mejorar el estado de nuestro sistema cardiovascular, pero existen bases científicas para afirmarlo. Y no es ninguna novedad, puesto que ya en 2005, una investigación conjunta de las universidades de Carolina del Norte y de Pittsburgh establece un vínculo entre esta muestra de aprecio y una presión sanguínea más baja. 5. Disminuyen el riesgo de contraer algunas enfermedades comunes. Otro de los beneficios es que, de alguna manera, refuerzan nuestra barrera inmunológica. Tras administrar a los participantes unas gotas nasales que contenían virus causantes del resfriado común, científicos observaron que cuando aumentaba la frecuencia con la que eran abrazados, se reducía la probabilidad de contagio. Incluso entre los que cayeron enfermos, aquellos que habían recibido más cariño y apoyo desarrollaban síntomas menos severos.

Sabemos, lectores, que aún debemos mantener la sana distancia, pero si tienes ganas de abrazar a tus seres queridos ¡No te detengas! Verás que te sentirás mejor después de dar esa muestra de estima y cariño. Asegúrate primero de que ninguno de los dos presente algún síntoma... por seguridad. Nos leemos la siguiente semana.

miércoles, 05 de enero de 2022

Redactor: Mariana Fuerte